Empezamos por el mercato centrale, un edificio de hierro muy grande que tenía embutidos, especias, carnes, frutas, pescados, hongos... de todo.
Seguimos por el museo de arqueología donde compramos las entradas para Uffizi, así evitábamos la colas, nos compramos unos sandwiches en The Oil Shoppe donde te los preparan con los ingredientes que quieras además de tener una variedad increíble, a buen precio.
Llegando a Santa María dei Fiore hicimos la fila para entrar, acosados por vendedoras ambulantes mala onda.

Al salir de la iglesia enfrente esta el baptisterio, de vuelta a la fila para entrar y más vendedoras con peor onda, le respondí a sus maldiciones con el viejo y efectivo a mi me rebota y a vos te explota, no les gustaba el regateo.
Caminando tranquilos fuimos para la galería, donde nos encontraríamos a La primavera y el Nacimiento de Venus de Botticelli, otro capo, entre miles de pinturas y esculturas de Giotto, Miguel Angel, Rembrant, etc.

Después de caminar toda la galería nos fuimos a ver ponte Vecchio y sus joyerías, el palazzo Pitti, la iglesia de Santo Spirito y bordeando el Arno subimos a la Piazzale Michelangelo para tener una linda vista desde la altura de Florencia.
Volviendo para el hotel paramos en la esquina a comprar pizza, muy rica, para llevar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario