sábado, 28 de febrero de 2009

Día 25 - Sauveterre de Beárn - Navarrenx - Oloron Ste. Marie

La próxima parada era Sauveterre de Beárn, el camino que recorrimos de los pueblos vascos es muy lindo, tiene una geografía con bastante ondulación teniendo en cuenta que no está muy lejos de los Pirineos.
Sauveterre como otras ciudades a las que llegamos por la tardecita estaba desierta. No pudimos entrar a la iglesia por que estaba cerrada, pero bordeamos el Gave d´Oloron entre el verde y las flores y estuvimos en el puente de la leyenda, la que cuenta que arrojaron al río a una mujer atada como castigo y al salvarse la consideraron inocente.

Campiña Vasco Francesa.


Puente de la leyenda.

La torre Monreal.

El río y el Puente.

Cuando llegamos a Navarrenx estaba oscureciendo, es una ciudad fortificada asi que visitamos partes de la muralla que nos mostraba una linda vista del Río Oloron y también paseamos por la ciudad hasta llegar a la iglesia. Para ese entonces ya era de noche y estuvimos buscando un lugar para cenar pero ante los precios que nos mostraban las cartas decidimos cenar en Oloron.- Igualmente antes de irnos visitamos la iglesia de Saint Germain que estaba en la penumbra con unas pequeñas velas encendidas.

Vista desde la muralla hacia el Río Oloron.

Iglesia Saint Germain.

Oloron-Ste-Marie, llegamos pasada la hora de la cena, teníamos mucho hambre pero no queríamos dejar de ver la Catedral Saint Marie (una vez más tarde, otra que estaba cerrada) lo que pudimos apreciar en la portada de la Catedral fue muy lindo, pero por la oscuridad y la lluvia no pudimos aprovechar al detalle esta obra de arte.
Cenamos en un restaurant el menú del día, en parte porque estaba a nuestro alcance, en parte porque entendimos que era!!! entrada buffet de ensaladas y fiambres, pollo confitado con ensalada y carne picada bastante condimentada fueron los platos, acompañados con sangría (sidra)
Lluvía sobre Oloron.

Único restaurant donde comimos en Francia.

Volvimos bajo la lluvía, pasamos por Pau, ciudad bastante grande y fuimos siguiendo los carteles en la dirección a Sendets, en un momento nos empezamos a sentir perdidos (no era una novedad) y lancé mi frase "no pasamos por Morlaàs, no estamos tan mal!" al minuto estabamos en Morlaàs lo que decía que nos habíamos pasado de largo.
Salimos por otro camino hacia Sendets, en una esquina encontré a una persona en un auto estacionado que me indicó como llegar a la iglesia, punto de referencia para llegar. Otra vez más la gente en Francia se mostraba muy amable.

domingo, 22 de febrero de 2009

Día 25 - St. Jean de Luz - Sare- Ainhoa- Espelette

Descansamos muy bien en La Margelle, un silencio y lugar de mucha calma ya que es una casa casi de campo, a la mañana cruzamos el patio principal y desayunamos en el living de la casa de los dueños, Jean Michel nos trajo hasta una vecina que hablaba bien español, comimos panes, croissant, dulce casero, jugo y café. Gracias a las recomendaciones cambiamos nuestro recorrido y salimos a St. Jean de Luz, pasamos por Biarritz y ahí compramos paté, baguettes y un queso Brie que nos salio 1 euro!!

Habitación de La Margelle.

Sala de estar.

Playa en St. Jean de Luz.

Pasamos un rato en la playa, almorzamos, recorrimos un poco el lugar en auto y de vuelta a la ruta.


Casas en el camino.

Sare.

Caminando por Ainhoa.

Casas del centro del pueblo.

Los pueblitos que pasamos están en la parte vasca de Francia, los carteles están en francés y vasco, todos tiene en su plaza principal la cancha de pelota.

Ainhoa.

A esta altura del camino nos bloquearon las tarjetas de crédito, con una tarjeta que habíamos comprado en París llamamos a Argentina y conseguimos que nos desbloqueen, sino estábamos al horno!!
Después de caminar un poco por Ainhoa salimos para Espelette, donde se producen morrones y sangría, lo particular del pueblo es que cuelgan los morrones en paredes de las casas.

La producción secándose.

Calle céntrica.

Colgando más morrones en el hotel.

Un breve descanso en Espelette y salimos para el próximo pueblo.

domingo, 15 de febrero de 2009

Día 24 - Saint-Cirq-Lapopie - Rocamadour - Carennac

El tramo que siguió fue bastante sinuoso, en continua subida y no había rectas, eran curvas grandes o chicas ...solo curvas. En muchos tramos las hojas secas volaban a nuestro paso, fue un viaje de "propaganda" televisiva.


Colores del camino.


Caminos boscosos.

El tercer pueblo fue Saint-Cirq-Lapopie esta situado en lo alto de un acantilado y a la vera del mismo pasa el Río Lot. Todas las casas del pueblo se construyen con los mismos materiales, sacados de la región. Como el resto de los pueblos recibe muchos turistas.

Saint-Cirq-Lapopie.

Techos del pueblo.

Río Lot.

Vista desde lo alto del mirador.

Rocamadour es una ciudad cuya construcción esta enclavada en el acantilado, es una ciudad santuario a la que llegan muchos peregrinos, y tiene 7 capillas y en una de ellas se encuentra la Virgen Negra, se puede subir por escaleras y hay un ascensor, en la zona se hace el queso Rocamadour, es de leche de cabra bastante fuerte y muy rico, nos comimos una baguette de ese queso con nueces, en el local también hacían churros.

Llegando a la ciudad.

Dentro del santuario.

El Fuerte.

El bosquecito que llega al fuerte.

Es impresionante como la roca hace de pared, algunos frescos subsisten en la paredes como se ve en la foto que sigue.

Santuario.

Rocamadour desde lejos.

Se nos hacía tarde y nos quedaban dos pueblos, dejamos Loubressac afuera del camino y nos fuimos a Carennac, llegamos como siempre cuando estaba casi todo cerrado a pesar de no ser muy tarde.

Calle de Carennac.


Río Dordoña.

El Corsa y la calle vacía.

Nuestra hoja de ruta en excel nos decía que YA teníamos que salir para Sendets, donde teníamos reserva en La Margelle.
Llegamos a las 23:20, una hora tarde ya que nos perdimos en la entrada de Sendets, que es un pueblo muy pequeño camino a Pau, llovía y no veíamos nada, por suerte en una parada de colectivos había un plano y con eso más el impreso de la Michelin nos orientamos.

sábado, 14 de febrero de 2009

Día 24 - Penne - Cordes Sur Ciel

El trayecto y paseo de este día era en auto, así que después de levantarnos bien temprano (a eso de las seis) nos tomamos tiempo con el desayuno del hotel que era espectacular....
Los pueblos que visitamos en este día fueron varios, están situados en la región del Lot y son todos de la época medieval y considerados por Francia como patrimonio cultural.
La primer villa o pueblito fue Penne, era muy temprano y todo estaba cerrado. Caminamos por calles peatonales desiertas. Fue un encanto, un silencio singular en medio de la montaña y el ruido de pocos habitantes que empezaban a levantarse. Uno de ellos al vernos cruzó de su casa a la iglesia y la abrió para que pudiésemos entrar.

Muy temprano en Penne.

Calle angosta.

Rincón de luz.

El viaje fue en otoño, lo cual no solo fue muy buena la elección del tiempo por el tipo de viaje que queríamos hacer, sino porque en cada país que visitamos a medida que pasaban los días la gama de colores que aparecían daba a cada lugar un entorno de película.
Penne es de los cinco que visitamos en el día el más pequeño, muy pocas casas habitadas y muchas en venta.

Jardín con vista a la montaña.

Otra ventana a la montaña.

Pablo, yo y nuestras almas en la calle.


Colores camino a Cordes.

EL segundo pueblo en la lista era Cordes Sur Ciel, fue creado en 1222 por el conde de Tolosa. Es una ciudad peatonal que impacta por su arquitectura y por la cantidad de artesanos que le dan un color y vida especial a la ciudad. La iglesia vale la pena visitar y la plaza de la Bride tiene una vista muy linda de los alrededores.Parte de la calle principal.

Peluches artesanales.

Uno de los palacios del pueblo.

Ale posando frente a una casa de venta de Acuarelas.

Iglesia de Saint Michel.

Una de la Puertas de la muralla.

viernes, 13 de febrero de 2009

Día 23 - París

Teníamos poco tiempo era el último día en París y por la tarde salía nuestro tren para Toulouse. Aprovechamos que en el hotel nos habían dado un dato para poder comprar algunos juguetes y después del desayuno nos fuimos para allá. Nos costó encontrar jugueterías.

habitación del Apart Valley.

Pablo en Place d'Italie.

No podíamos dejar de ver Moulin Rouge aunque sea por fuera y de día. No estábamos lejos de Montmartre así que caminamos hasta llegar y pasear de nuevo por las callecitas peatonales y disfrutar un rato sentados en la plaza.
Justo ese día en el barrio había exposición de productos típicos y feria ( mucha gente....).


De fondo Moulin Rouge.

Bicicletas de Alquiler.

En la feria junto a un alambique.

Grupo de músicos que desfilaban por Montmartre.

Después de pasear por la feria nos fuimos de Montmartre, repetimos la compra de una baguette de poulet (pollo) en un lugar muy rico y barato, y cerca de ahí encontramos un negocio donde la gente revolvía la ropa (alguna quedaba en el piso) y se mataba por las ofertas de distintas marcas.

Super ofertas parisinas.

Volvimos al hotel, juntamos las mochilas y partimos hacia Gare Montparnasse para tomar el tren bala a Toulouse, esperamos un rato en la estación hasta que llego la hora.
Teníamos los pasajes impresos en nuestra casa, obvio argentino desconfiado fui a preguntar si necesitaba hacer algo más... con el papel era suficiente.
Para subir a nuestro vagón caminamos un montón, el tren bala son en realidad dos trenes muy largos.

Ale rumbo a Toulouse.

Este día tuvimos el único problema de todo el viaje con las reservas, la gente de Europ-car nos avisó solo un día antes por mail que no teníamos el auto en la estación de Toulouse, sino que lo debíamos buscar en el aeropuerto, así que tomamos un taxi-nave BMW. En el aeropuerto de Blagnac nos dieron el auto económico un Opel Corsa con seis airbags, control de velocidad crucero, control remoto del cd al volante, etc., estaba nuevo con solo 300 kilómetros.
Salimos con nuestro mapita impreso de la guía Michelin rumbo a Mountauban, una ciudad más cercana a nuestro recorrido del próximo día.
Llegamos a la una al hotel Ibis Mountauban.