Comenzamos caminando por la orilla del Sena,hasta llegar al Museo de Orsay (tiene una importante colección de arte impresionista ) y visitarlo.
Caminamos por el costado de la Isla de La Cite,la Catedral de Notre-Dame, Pont Neuf,hasta llegar al Museo.
París tiene una cantidad muy grande de cafecitos, en donde la gente se junta después del trabajo a la tardecita y ponen sus sillas o asientos mirando a la vereda, eso también ocurre en algunos restaurants.

A esta altura ya estábamos fascinados por la arquitectura, por la educación de la gente, las bicicletas de alquiler y lo largo de las cuadras!
Después de un buen paseo por la orilla del Sena entramos al Museo, una vieja estación de tren, la colección espectacular y variada, muchos escolares aprendiendo en vivo y en directo sobre el impresionismo.
Después de un buen paseo por la orilla del Sena entramos al Museo, una vieja estación de tren, la colección espectacular y variada, muchos escolares aprendiendo en vivo y en directo sobre el impresionismo.

Antes de salir pasamos por la librería donde conseguimos uno excelente para Abril sobre Monet. Nos fuimos caminando hacia Champs Elysees, donde descansamos un rato, vimos algunos locales de ropa donde la crisis ya traía ofertas, Abril siguió con su buena suerte, descansamos un ratito en un banco.

A esta altura caminábamos por inercia, empezaba a llover pero estábamos tan cerca de la torre Eiffel que enfilamos para allá.

Antes de llegar vimos las luces destellando en la torre, lo que se da solo a una hora, después nos empapamos y gracias a un error mío (Pablo) en la lectura de un mapa (muy mojado, si eso es excusa) caminamos 5 cuadras de más hasta el tren, en lugar de media hasta el subte. Las boleterías estaban cerradas así que pedí en espanglish (me recomendaron hablar poco en inglés) cambio en un buen restaurant parisino, la maitre fue muy amable como todos los franceses con los que tratamos, quitándonos esa idea que te dan de que tratan mal al extranjero.
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